Con 21 votos a favor, el Congreso de Hidalgo aprobó la llamada “Ley Ácida” o “Ley Leslie” que establece el aumento de las penas a quien o quienes provoquen lesiones con sustancias químicas o corrosivas a una persona.
El dictamen leído en el pleno por el diputado Luis Ángel Tenorio Cruz, adiciona el Capítulo II Bis, denominado “Lesiones inferidas por sustancias químicas y corrosivas”, al título primero del libro segundo del Código Penal para el Estado de Hidalgo, que menciona agravantes que podrían aumentar las sentencias de prisión hasta 32 años.
De acuerdo con el legislador morenista, en Hidalgo existen 14 carpetas de investigación de 2017 a 2023 relacionadas con delitos de lesiones dolosas inferidas con sustancias como ácido, raticida y gasolina, entre otras, siendo el caso de Leslie Moreno el que fue uno de los detonantes para impulsar esta ley.
En el Código Penal estatal ya se encontraba tipificado este delito, en el artículo 141 Ter, no obstante, a consideración de los promoventes, “resultaba insuficiente para hacer frente a esta devastadora forma de violencia contra las mujeres”, por lo que se estimó necesario reforzar el marco normativo.
De igual forma, se impondrá el doble de la punibilidad prevista en el artículo 144 bis, es decir, de 12 a 32 años de prisión, cuando en la comisión del delito la víctima sea niña, niño, adolescente, mujer o persona con discapacidad; o afecte una función vital o más de la mitad del cuerpo.
La búsqueda de justicia de Leslie Moreno
Luis Ángel Tenorio resaltó el trabajo realizado por Leslie Moreno, víctima de este delito hace nueve años, y Santiago Nieto Castillo, exencargado del despacho de la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo, para generar la iniciativa aprobada, que fue presentada en 2023, y brindar una luz de esperanza para que se les haga justicia a las personas que han sido agredidas.
Leslie Moreno sostuvo que desde que ocurrió el ataque en su contra no ha tenido paz pues sus agresores, tanto la autora intelectual como el material, se encuentran libres y acusó que ha existido corrupción por parte de los jueces que han llevado su caso.
“Mi agresora está libre, mi agresora asesinó a mi testigo dos días después de mi reconocimiento en cámara Gesell, por lo que mi vida está en peligro. […] El juez David Adrián Martínez Santiago liberó a mi agresora después de darle a conocer a mi testigo”, manifestó, al tiempo que señaló que ha recibido amenazas y todavía espera obtener justicia, a casi 10 años de haber sufrido el ataque.
-Con información de La Silla Rota
Deja un comentario